Tapping temporal: TLE (técnica de liberación emocional) para curar la ansiedad
Soluciona tus problemas mediante suaves toquecitos, tal y como propone esta técnica energética
¿Y si te dijeran que tus problemas de estrés, ansiedad y depresión se pueden solucionar con unos simples golpes en algunas partes del cuerpo? Lo que a priori parece una técnica absurda, el tapping temporal, se ha revelado como una de las terapias energéticas de moda o TLE (terapias de liberación emocional) y cada vez más usuarios coinciden en señalar su eficacia. Lo mejor: ¡Lo puedes hacer tú solo! Presta atención.
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Qué es el tapping temporal
La base de la terapia energética conocida como tapping temporal es que todos tus problemas (amorosos, familiares, económicos, de autoestima…) tienen su origen en desequilibrios internos que permanecen dentro de tu organismo. El tapping desarrolla una técnica para deshacer estos desequilibrios golpeando suavemente algunas partes del cuerpo.
Detrás de esta técnica aparentemente superficial hay toda una filosofía que se resume en esta máxima: para solucionar un problema, hay que hacerlo emerger a la superficie y eliminarlo. Por eso, como verás a continuación, la primera fase consiste en revivir el problema, llamarlo para que aparezca, e iniciar su superación mediante la asimilación.
En este caso, el tapping temporal se ha convertido en una terapia muy solicitada que contradice los principios de otra moda, la del pensamiento positivo. Mientras que el pensamiento positivo propone prescindir de los problemas dando prioridad a las ideas optimistas y vitalistas, el tapping parte precisamente de hacer salir el problema a la superficie.
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Cómo hacer tapping en dos pasos
En realidad, el tapping temporal es una terapia ancestral que se ha redescubierto hace poco y se ha actualizado como tratamiento complementario para la transformación vital y el combate contra el estrés y la depresión.
1. Fórmula verbalmente el problema
Como la mayoría de las técnicas orientales, el tapping no es un remedio milagroso al que puedes recurrir cuando te apetezca y activar sus beneficios sin más. Se trata de una dimensión espiritual más profunda a la que tienes que acceder mediante la relajación y la meditación. En esta terapia energética se va desde la mente hacia el espíritu y el cuerpo.
Y puesto que lo esencial es que te familiarices con el problema y lo hagas aflorar, el primer paso consiste en formular verbalmente aquello que quieres cambiar en tu vida, o aquellas preocupaciones que te tienen angustiado.
La formulación puede ser negativa, cuando intentas hacerte consciente del problema que quieres eliminar. Por ejemplo: “estoy arruinado”, “me siento gorda”, “mi relación es un desastre” o “me encuentro mal”. Pero también podemos hacerlo en positivo, como un intento de llamada en consonancia con la ley de la atracción: “quiero ser un líder en la oficina”, “la prosperidad económica llega a mi casa”, “tengo un físico envidiable”, “me quiero como soy”.
2. Golpear algunas zonas del cuerpo
En realidad esta segunda acción está sincronizada con la primera. Mientras exteriorizas el problema y atraes el cambio mediante tus palabras, tienes que golpear algunas partes de tu cuerpo con un sentido determinado. Estos puntos no son al azar, sino que se encuentran en los meridianos de la acupuntura.
- 0. El lateral de la mano, entre la base del dedo meñique y la muñeca.
- 1. La parte superior de la cabeza.
- 2. El extremo interior de la ceja.
- 3. El lateral del ojo.
- 4. El hueso que hay debajo del ojo.
- 5. Entre la nariz y el labio superior.
- 6. La depresión entre la barbilla y el labio inferior.
- 7. La punta del extremo interior de la clavícula.
- 8. Unos cuantos dedos por debajo de la axila.
- 9. El ángulo interior de la uña del dedo pulgar.
- 10. El ángulo interior de la uña del dedo índice.
- 11. El ángulo interior de la uña del dedo corazón.
- 12. El ángulo interior de la uña del dedo meñique.
¿Cómo es una sesión de tapping?
El tapping es una terapia que viene a sumarse a otras terapias de moda como el reiki o la acupuntura, solo que en este caso la ventaja es que lo puedes hacer tú solo en casa. Es un procedimiento bastante sencillo en el que lo más importante es la preparación mental y espiritual.
En una sesión de tapping es esencial identificar el problema, o aquello que quieres cambiar en tu vida. No estás hablando para ninguna autoridad, y eso es importante que lo tengas presente: ¡Estás hablando para ti mismo! La idea es que interiorices tu problema y lo saques a la superfície. Por eso utiliza un lenguaje ameno, coloquial, directo. Evita las construcciones rebuscadas y superficiales.
Escoge una frase y repítela poco a poco, lentamente, mientras golpeas el punto 0. Si tu problema es que no tienes trabajo, construye la siguiente frase: "Aunque no tengo trabajo, me acepto totalmente". O si tienes mal de amores, di: "Aunque mi amor no es correspondido, me acepto totalmente". Sigue siempre el mismo esquema mientras inicias los golpes suavemente.
A partir de aquí empieza a golpear por orden el resto de punto utilizando la frase sola: "No tengo trabajo", o "Mi amor no es correspondido". Sigue todos los puntos por orden, golpeando suavemente con el dedo índice. La velocidad y el número de golpes es indiferente. Se necesitan algunas sesiones de tapping para notar los primeros cambios, pero no existe una cifra exacta: depende del problema y de tu fortaleza mental.
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