Tarot de la baraja española: su uso en la tirada del tarot

A la hora de leer el futuro,  lo más habitual es usar las cartas del Tarot de Marsella, el cual está compuesto por 22 arcanos mayores y 56 arcanos menores. Su popularidad es enorme debido, entre otros asuntos, a que fue la primera baraja impresa de manera industrial.

Así, los arcanos mayores son los formados por El Mago, la Papisa, El Emperador, la Emperatriz, el Loco, el Carro o el Enamorado, entre otras figuras, y los menores, unas cartas numeradas del 1 al 10 a las que se suma la sota, el caballero, la reina y el rey. Estos juegos, a su vez, se dividen en cuatro palos: oros, espadas, copas y bastos.

Estos mismos palos son los que forman la conocida como baraja española, y así, no es de extrañar que también sea habitual que se hagan tiradas de tarot con este tipo de cartas.

La tirada del tarot con la baraja española

El origen de la baraja española viene de la baraja de Sevilla, la más antigua conservada en la península ibérica y que data del año 1400, y cuya representación es similar a la de hoy día. Sin embargo, hay expertos que creen que en los palos de oros, bastos, copas y espadas hay cierto simbolismo que procede de la cultura del antiguo Egipto.

Así, cada familia se correspondería a uno de los estratos de la sociedad egipcia: las monedas de oro, vinculadas a los comerciantes; las espadas para señores y gobernantes; las copas, para los sacerdotes y los bastos para los agricultores.

Dicho simbolismo se ha perpetuado a lo largo del tiempo, y es popular tanto para el uso recreativo de las barajas de carta como para hacer una tirada de tarot, aunque se recomienda que aquella que se emplee para jugar al mus o cualquier otro entretenimiento no se emplee con fines mágicos.

 

El significado de las cartas del tarot de la baraja española

Como hemos mencionado, las cartas de la baraja española son similares al grupo de los Arcanos Menores del Tarot de Marsella, si bien ha desaparecido de ellos la figura de la reina (que sí permanece en la baraja francesa, que a su vez prescinde de los caballeros).

Igualmente, hay que destacar que hay barajas que incluyen los números 8 y 9, y otros no, pero en cualquier su poder es el mismo.

Cada uno de los cuatro palos de la baraja española está relacionado con  la hora de leer el tarot con  una dimensión emocional concreta de las personas, y que detallamos a continuación.

Las Copas

Este color está relacionado con la dimensión emocional de las personas y sus temas sentimentales,  tales como los romances, la vida en pareja, la familia, los hijos, las amistades. También se relaciona con los signos del zodiaco de agua, es decir, Cáncer, Piscis y Escorpio. Además, tiene equivalencia con la temporada de invierno.

Los Oros

Las cartas representadas por monedas de oro están vinculadas al éxito o fracaso material  y al reconocimiento de los demás. Entre otros asuntos, nos darán informaciones de deudas y herencias, de inversiones, derramas… Se corresponde, igualmente, con los signos de tierra del zodiaco (Tauro, Virgo, Capricornio) y con la temporada de verano.

Las Espadas

Este palo de la baraja española representa la salud del consultante, ya sea física o mental; en general, tiene connotaciones negativas, y augura accidentes, enfermedades y molestias en general. Además, simboliza los signos Géminis, Libra y Acuario, aquellos considerados de aire, además de la temporada de otoño.

Los Bastos

En este caso, es un palo que  abarca varios temas de manera más abierta, tales como el trabajo, el movimiento, la energía, la acción, o incluso los viajes y desplazamientos. Igualmente, evocan los signos del fuego (la triada formada por Sagitario, Leo y Aries) y además representa la primavera.

Sistemas de adivinación del tarot con la baraja española

Se suele decir que una de las principales ventajas de la baraja española a la hora de hacer una tirada de tarot es que  describe situaciones inmediatas, y se suele describir como un método de adivinación muy certero.

Antes de hacer la tirada y la lectura del porvenir, el adivino baraja las cartas y las debe separar en tres mazos. Lo baraja de nuevo, y en esta ocasión, permite a la persona consultante que corte con la mano izquierda en otros tres montones que se vuelven a unir, y es entonces cuando comienza la lectura.

Existen varios tipos de tirada de tarot de la baraja española,  y cada uno de ellos depende de la intención del solicitante. Por ejemplo, existe la llamada tirada general, que emplea las 40 cartas, y busca comprender los problemas con cierta perspectiva, del mismo modo que está la tirada del Círculo Encantado o la tirada en Flecha.

 

Para los no iniciados, la tirada del tarot en forma de pirámide es de las más sencillas, y para ello se sacan 20 de las cartas de la baraja española, y el resto se dejan a un lado.

Con dichas cartas  se colocan en forma de triángulo en cuatro plantas: en la primera habrá una sola carta; en la siguiente fila dos, tres en la de después, y por último, una fila de cuatro cartas.

Como nos sobran diez cartas, se realiza una nueva pirámide que solape con las cartas ya colocadas, por lo que queda una pareja de cartas en cada punto de los que componen el nivel.

Así, las dos primeras cartas de arriba del todo nos plantean el asunto que queremos tratar; las cuatro de abajo, las posibilidades que tenemos para solucionar el problema. En el tercer nivel hay seis cartas, que indican la esencia y la razón de ser del conflicto del que queremos saber más. Por último, la cuarta planta nos mostrará cómo solucionar el problema.