Los 10 dioses egipcios más importantes del Antiguo Egipto
Las divinidades de la religión egipcia y sus características más sorprendentes
En el Antiguo Egipto había muchos dioses y estos se representaban con cuerpo humano y cabeza animal. Te acompañamos por el estimulante mundo de la mitología egipcia a través de los principales dioses egipcios, que eran venerados como divinidades que controlaban los elementos de la naturaleza, proveían a los humanos y regían el destino de sus vidas y de sus almas.
Los dioses egipcios: Así eran las divinidades del Antiguo Egipto
En el Antiguo Egipto imperaba un complejo sistema de creencias politeístas y rituales que se basaba en la existencia de varias divinidades que controlaban los elementos de la naturaleza y regían el destino de los hombres. Hay que decir que la visión religiosa egipcia no fue unitaria, puesto que evolucionó y se dividió en varios grupos durante la larga vida del imperio.
Así, por ejemplo, las variaciones teológicas evolucionaron en grandes corrientes que dieron forma a las dos grandes mitologías egipcias: la de Heliópolis y la de Hermópolis.
Según la mitología más extendida en Egipto, la de Heliópolis, antes de la humanidad reinaba el caos en forma de agua turbia que contenía la semilla de la vida. Desde sus profundidades irrumpieron las montañas, y en la cima de la colina central emergió el huevo del que nacerá el Sol. En esta cosmogonía, el papel central lo juega Ra, el dios del Cielo, de la Tierra, y de todas las cosas existentes.
El dios creador es también el origen de la Gran Enéada, un grupo de nueve divinidades supremas que, junto a Ra, incluyen a Shu (el aire), Tefnut (la humanidad), Geb (la Tierra), Nut (los cuerpos celestes) y sus cuatro hijos: Osiris, Isis, Seth y Neftis.
Para los egipcios, la religión era el principal factor de la vida social y algo muy importante porque a través de formar un ritual de las creencias lograban conseguir el favor de los dioses y su provisión. La conexión entre los hombres y las divinidades era el faraón, pues este se consideraba una representación de los dioses en la Tierra.
Una de las funciones principales del faraón era garantizar el orden religioso de los dioses en la Tierra, para la cual el Estado destinaba grandes cantidades de dinero en la construcción de templos y la celebración de rituales.
Para la religión egipcia, el elemento primordial era la muerte como principio del viaje hacia el más allá. Por eso los ritos funerarios y su función, garantizar la supervivencia más allá de la muerte, alcanzaron un lugar central en sus creencias y, como legado, nos quedan sus grandes símbolos: las momias y las pirámides.
Los 10 dioses egipcios más importantes
En la corriente religiosa más extendida del Antiguo Egipto, la mitología de Heliópolis, la vida del mundo comienza con el dios supremo, Ra, y la vida del hombre acaba con su acceso al inframundo, cuyos dominios rige el dios Osiris.
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A continuación te ofrecemos una explicación de los dioses egipcios más importantes en una de las mitologías más apasionantes.
1. Ra
Los egipcios representaban al dios Ra con cuerpo humano y cabeza de halcón. Era el dios del Sol y de los dioses egipcios el más importante, pues estaba presente en la creación del Cielo y de la Tierra, y de la Gran Enéada de dioses superiores. Los egipcios creían que con el sol del atardecer Ra viajaba hasta las profundidades para emerger de nuevo al amanecer.
Durante el día, el dios Ra viajaba en una gran barca, Mandjet, y por la noche entraba en la boca de la diosa de la noche, Nut, adoptando la forma de carnero. En la noche, Ra libraba una dura batalla contra la serpiente Apofis en las aguas profundas de Nun: una lucha entre la luz y la oscuridad para evitar que volviera el reino del caos.
Como dios, Ra poseía cuatro facultades: el gusto y la palabra, la visión, el oído, y el tacto y el entendimiento. Además, representaba las virtudes de la abundancia, el estrépito, el resplandor, la magia, la alimentación, la producción de alimentos, la victoria, la luminosidad, la gloria, la habilidad el honor, la prosperidad y el vigor.
Una curiosidad: en el libro de la creación de los egipcios Ra dice que crea el Cielo, la Tierra y los demás dioses a través de su boca, con solo nombrarlos, pero también a través de la masturbación.
2. Amón
Es el paralelo griego del dios Zeus, llamado Amón en la mitología egipcia y representado como un humano con dos largas plumas verticales. Aunque inicialmente no era un dios importante y solo se concebía como dios de la brisa, con la invasión de los Hicsos en el siglo XVII a. C. adquiere importancia nacional al quedar fusionado con Ra: el dios Amón-Ra.
Como dios supremo, Amón era considerado un dios invisible que no podía ser visto por los mortales ni por otros dioses, y por eso era considerado dios de lo oculto y el poder misterioso. Durante el Imperio Nuevo conservó su hegemonía en el panteón y fue venerado como dios trascendental, de la excelencia, de los pobres y de la piedad.
En su momento de máximo esplendor, Amón consolidó una evolución monoteísta de la religión egipcia, pues se consideraba que todos los demás dioses eran manifestaciones del propio Amón, “el dios único que se convierte en millones”.
3. Osiris
Puesto que la religión del Antiguo Egipto consagraba el culto a la muerte, Osiris, dios del inframundo, es una de las principales divinidades del panteón. Es caracterizado como un cuerpo humano momificado con corona blanca y dos plumas.
Per-Usir o “el Templo de Osiris” es uno de los nueve reinos del delta. Por lo tanto, Osiris nació como un dios local que bendecía los cereales, la cosecha y la agricultura, y fue ganando protagonismo a nivel nacional como “príncipe de los dioses del Duat”, el inframundo.
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De hecho, este cambio de dimensión fue solo una traslación de la cosecha a la vida humana: identificado con el gran y el trigo, Osiris encarnaba la renovación y el renacimiento de la tierra, pues este dios moría en la estación más seca y renacía tras la retirada de las aguas de la crecida. Como dios del inframundo, completaba la resurrección de los mortales.
Los egipcios creían que al morir iniciaban un viaje por el cielo a bordo de la barca de Ra y descendían hacia el inframundo para encontrarse con Osiris, que completaba su transmutación del cuerpo humano mortal en alma divina.
4. Isis
Representado como una mujer con un trono en la cabeza, Isis era reina de los dioses y diosa madre, una diosa-cielo que había embalsamado y resucitado el cuerpo del dios Osiris y protectora del dios niño Horus hasta que este creció y pudo desarrollar su divinidad.
En un concepto dualista, Isis es la oposición a Neftis, diosa de la oscuridad y de la noche, pues Isis representa la luz y el nacimiento. Por eso era considerada divinidad de la maternidad, protectora de las madres, los niños y la familia. En la mitología egipcia Isis se une a Osiris para parir a Horus, pero pierde a su marido cuando este va hacia el más allá.
Por eso Isis también se asociaba a la viudedad, el dolor de la pérdida y la soledad. Además, Isis era una divinidad mágica, pues había resucitado el cuerpo de Osiris, y había obligado a Ra a revelarle su nombre, obteniendo ascendiente sobre él. Por esto era considerada “La Gran Maga”, poseedora del conocimiento oculto y la sabiduría.
5. Thot
Conocido como “el dios de Dyehut”, uno de los territorios del Bajo Egipto, Thot era venerado como un dios lunar medidor del tiempo. Según la mitología egipcio, Ra lo había colocado en el cielo durante la noche (la luna) para dejar un rastro de luz mientras él se batía en duelo con las criaturas de las profundidades.
Se representa como humano con cuerpo de ibis (ave zancuda parecida a la cigüeña).
Como medidor del tiempo es el dios que organiza el calendario (y en su honor le dió nombre al primer mes del año). Como primer ministro del panteón dirige al resto de dioses y procura que las decisiones del demiurgo sean cumplidas.
Una de sus principales características es que inventa la escritura, motivo por el cual Thot era dios de los escribas, de las artes y las ciencias, y gran divinidad del poder de la palabra.
6. Horus
Los antiguos decían que el dios Horus tenía como ojos la luna y el sol, pero cuando los sacerdotes de Heliópolis dieron el sol a Ra, se quedó con el ojo de la luna. Se representa como un hombre con cabeza de halcón, y mientras que Thot es el dios del cielo occidental, Horus es venerado como el dios del cielo oriental.
O sea, Horus es el señor de la montaña por donde el sol asoma cada mañana y, como parte de la tríada de dioses más importante (Isis, Osiris y Horus), así como Osiris era el rey muerto a Horus se le considera el rey vivo. En el Libro de los muertos, sus cuatro hijos ayudan al faraón a acceder al paraíso.
En la historia de Horus subyace la lucha por el poder. Isis protege a Horus cuando es niño mientras este se prepara para la gran batalla contra Seth: ambos se disputan el trono de su padre. En los textos se presenta esta lucha como la oposición entre Osiris y Ra, entre el cielo y el inframundo. En la lucha, Horus pierde el ojo, mientras que Seth pierde sus testículos.
7. Seth
Sin duda el dios más temido de los egipcios. Representado como un animal no identificado con las orejas puntiagudas, no era un dios maligno, pero su fuerza sobrenatural era el origen de las desgracias y, en los escritos de veneración a Osiris, se le consideraba un criminal.
Seth se identifica con el desierto y el trueno, gobernante de las nubes tormentosas y señor de las borrascas del viento del sur. Tiene unas connotaciones negativas que se asocian a la sequía, la esterilidad, la violencia, las plagas, el hambre. Se creía que los gusanos salían de la tierra a causa del aliento de Seth.
Cuenta la mitología egipcia que la diosa de la tierra Geb dio a Osiris la tierra fértil de Egipto, mientras que Seth se quedó con los desiertos. Envidioso de su hermano, Seth emprendió una lucha que acabó con la muerte de Osiris, en una lucha entre el bien y el mal. Más tarde, Horus lucha para recuperar el trono de su padre.
Señor de las tinieblas, de la oscuridad y del mal, durante muchos siglos su culto estuvo prohibido, sus estatuas fueron destruidas y su nombre prohibido.
8. Anubis
Divinidad representada con cuerpo humano y cabeza de chacal, Anubis significa precisamente eso, "chacal", y es la diosa de los muertos antes de la extensión del culto a Osiris. Como uno de los dioses egipcios más antiguos, la función de Anubis era acompañar al fallecido en su viaje hacia el más allá, motivo por el cual estaba siempre representada en los monumentos funerarios.
Además, Anubis había ayudado a Isis a embalsamar el cuerpo de Osiris, motivo por el cual era considerada como ayudadora de los sacerdotes embalsamadores. Una vez que ha colaborado en la permanencia del cuerpo eterno en el mundo terrenal, preside la presentación del alma ante el tribunal de Osiris. En el Libro de los muertos Anubis acompaña al difunto hacia Osiris junto a siete espíritus.
A partir del Imperio Nuevo, y con la consolidación del culto a Osiris y la popularización del viaje al más allá en el Libro de los muertos, Anubis es el dios encargado de sacar el corazón al difunto para que sea pesado en la balanza de Maat, y valorar así sus pecados en vida y su bondad.
9. Imhotep
Imhotep es uno de los pocos casos (y el más relevante) de divinización de mortales. Su personalidad es apasionante, pues fue uno de los primeros arquitectos de la historia, gran sabio y sacerdote supremo de Heliópolis, médico, astrónomo y gran funcionario del faraón de Dyeser. Imhotep alcanzó el rango de dios por méritos propios y fue identificado como Nefertum, hijo de Ptah.
Como dios, era venerado como protector de la sabiduría y la medicina, y también consagrado como patrón de los escribas en el Reino Nuevo. Tenía su principal centro de adoración en Menfis, aunque también se extendió su culto en Tebas. Como uno de los primeros humanos convertidos en dioses, Imhotep era representado completamente como un humano, sentado y con un papiro de escriba.
10. Neftis
Representada como una mujer con el jeroglífico de su nombre en la cabeza, Neftis era la divinidad opuesta a la diosa de la luz y el nacimiento Isis. Sin embargo, no se trata de una oposición entre el bien y el mal. Sencillamente, Neftis es la diosa de la oscuridad y la noche, y de hecho Isis y Neftis actúan juntas para ayudar al difunto en su viaje hacia el más allá.
Por una parte, Neftis es la ayudante de los viajeros que transitan por lugares oscuros y hostiles, y por otra parte, participa en el mito de Osiris porque, junto a Anubis, ayuda a Isis a embalsamar el cuerpo de Osiris.
También es muy interesante el hecho de que, del mismo modo que Seth había perdido sus testículos en su lucha contra Horus, igualmente Neftis era venerada como una "diosa sin vagina". Sin embargo, había logrado mantener relaciones sexuales con Osiris, de cuya unión había surgido Anubis. Era una de las diosas más importantes, y por eso se representaba siempre en la cabecera del difunto.
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