Dharma y Karma: qué tienen en común estas dos leyes espirituales del Budismo
Seguir el Dharma significa seguir la ley para estar en orden, en armonía
Asociado con el budismo, el Dharma es una palabra de origen sánscrito vinculado a las leyes espirituales, al karma, incluso al yoga. Más allá de las religiones o creencias, una definición secular del Dharma sería el orden del mundo, lo que debe hacerse.
Lo más complejo es señalar qué determina los conceptos de Dharma y Adharma (lo opuesto a la acción que debe tomarse). ¿Tenemos que confiar en un comportamiento moral que viene dictado por la sociedad en la que vivimos, o debemos encontrar por nosotros mismos cuál es la acción correcta, el Dharma?
¿Qué es el Dharma?
El Dharma es el orden, la norma, la forma védica. Este último adjetivo proviene de la palabra “Veda”, que son los textos sagrados del segundo milenio antes de Cristo, de la primera religión conocida en la India. El Veda es un texto sagrado, una especie de revelación que trata sobre el nacimiento del mundo y la llama o el fuego.
Seguir el Dharma significa seguir la ley para estar en orden, en armonía. El Dharma es la justicia ideal hecha realidad, es el principio que respalda todo lo que se manifiesta.
En el budismo, el Dharma es un estudio de la vida misma: un intento de comprender todo lo que ocurre de manera interna y externa en esta vida. El dharma es también la suma de las enseñanzas y métodos propuestos para llegar a una comprensión del mundo y de uno mismo.
En el hinduismo se presenta al Dharma como la acción correcta, incluso como una ley. En el texto sagrado hinduista conocido como Bhagavad Gita, se dice que “si un hombre trata de seguir el Dharma correcto para una persona más desarrollada que él, no logrará ponerlo en práctica y, por lo tanto, perderá su tiempo y energía”.
Es lo que da sentido a la vida: sin el Dharma cualquier acto sería absurdo porque estaría motivado por la más absoluta nada. Si decides tomarte un tiempo para pensar cómo sería tu Dharma personal, ese viaje interior a buena cuenta estará repleto de conocimientos y de sorpresas.
Dharma y Karma: su relación
El Dharma está estrechamente relacionado con el concepto de Karma. El karma se entiende generalmente como "destino", pero en realidad significa "acción". El principio del karma es neutral, es una ley de causa y efecto. Cualquier acción produce un efecto, sencillamente, aunque el resultado de dicha acción puede variar según la persona que la ha llevado a cabo.
De este modo, comprobamos que no es el acto en sí lo más importante, sino la coherencia con el Dharma. Un acto de acuerdo con las leyes (ya sean de la sociedad, de la naturaleza, o incluso nuestras leyes espirituales) llevará hasta una consecuencia que consideraremos positiva. Las cosas fluyen, funcionan, estamos en paz.
Si la acción no se hace conforme a la ley puede perturbar la mente, dejando el poso de una sensación propia de cuando no se ha hecho algo correctamente, incluso si no tiene consecuencias inmediatas.
La rueda del Dharma (o Dharmachakra)
La rueda del Dharma, también llamada “rueda de la ley” o Dharmachakra, es un símbolo del budismo que representa su doctrina y la propagación de las enseñanzas de Buda.
La rueda del Dharma se representa como una rueda de carro más o menos estilizada con ocho radios. Se trata de uno de los iconos del budismo más ancestrales; hay rastros de la rueda del Dharma en el siglo II. En la actualidad, es un símbolo de reunión y fe para los budistas de todo el mundo y es fácil encontrarlo en adornos, joyas o en representaciones artísticas o históricas.
Es interesante resaltar que si la rueda del Dharma tiene ocho radios es porque representa el Noble Camino Óctuple del budismo, el camino que conduce al cese de la insatisfacción y el sufrimiento, en favor de la plenitud espiritual.
Dharma yoga y su relación con el Svadharma
Un concepto que debemos sumar al de Dharma es el Svadharma, el Dharma propio de cada uno, el deber propio de cada uno, las leyes espirituales de cada uno. Un concepto que estaría cerca del de vocación, canalización o realización. Tan pronto como tenemos una relación con este Svadharma, estamos en unión con nosotros mismos.
Cuando uno no actúa con el Svadharma propio, deja de estar en unión consigo mismo, y para encontrar ese equilibrio, podemos practicar Yoga.
La idea central del Yoga es la unión de uno con su Svadharma, luego con el Dharma del mundo. Haciendo Yoga lograremos una progresión lenta, pero inexorable de reunificación, de la reintegración de la estructura cósmica, que comienza con la reintegración con uno mismo.
- Quizás te interese: Todas las claves del Karma: ¿Existe realmente?
Más noticias: